Gustavo Morales
La patrulla española llega al oasis. Hugo, desde la torreta del blindado, observa como los oficiales se hacen fotos junto a algunos cadáveres anónimos repartidos por el suelo. En ese momento, dos iraquíes armados surgen de su escondite empuñando sus fusiles Kalashnikov. Hugo abre fuego con su ametralladora MG42. Ráfagas corta y certeras que sorprenden a los oficiales y neutralizan a los agresores. Un oficial comienza a gritar a Hugo: «¡Qué has hecho! ¿Tú qué sabías de sus intenciones?» El legionario señala los fusiles de los atacantes iraquíes pero el oficial no cesa: «Animal, lo mismo sólo querían hablar con nosotros». En esas estaban cuando otro grupo de iraquíes armados se lanza hacia el grupo de oficiales que está fuera del vehículo. Hugo dispara de nuevo y barre a los agresores. Por esa acción, el Ejército dio varias cruces al Mérito Militar con distintivo rojo, a casi todos, a Hugo no.